La mujer narra cómo recibió un recibo por las cajas de cervezas, pero en sus botellas había únicamente agua. Con mucha inocencia la mujer narra que el hombre en una moto se presentó a su local para venderle las cervezas falsas.
Esta dice que vendió una de las botellas frías a un familiar, por lo que le avisaron rápidamente que era agua, no cerveza. En ese momento procedió a revisar las cervezas, percatándose que todas estaban llenas de agua, pese a que estaban bien selladas.
Discussion about this post